La peña y la prensa

Diario de Noticias, 4 de julio de 1.997 [Ver el texto mejor abajo]

La foto de arriba: 1993. Homenaje al canadiense David "Big" Pierce (con gafas), por ser el extranjero más antiguo en nuestras fiestas. 
La foto en el centro: Tres suecos en el patio de caballos de la plaza.

La popular peña taurina Los Suecos

LA creciente presencia de ciudadanos suecos en Sanfernines derivó en la creación de una segunda peña de carácter exclusivamente taurino. La Peña Taurina Los Suecos nació en el año 1975 en la ciudad sueca de
Boras, fundada por L O. S. Desde entonces, ha desplegado una importante actividad que la convierte en una de las entidades  taurinas europeas -con la lógica acepción de las españolas- más activas.
Los socios de esta peña viven intensamente las ferias españolas, siendo habitual su presencia cada año en las de Pamplona, Sevilla, Valencia, Castellón, .Madrid, Málaga, Almería, Salamanca, Granada, Bilbao y Burgos. "Procuramos viajar a todas las ferias importantes -explica "Er Niño de la Caseta"-, y en mi caso concreto, también voy a Suda-mérica, en donde, al igual que aquí, la afición sueca es bien recibida".
Desde el mismo año de su fundación la Peña Taurina Los Suecos ha acudido fielmente a todas las citas sanfermineras aportando a nuestras fiestas su grano de internacionalidad. El más veterano de esta peña en las fiestas de San Fermín es el subdito sueco "Er Niño de la Caseta" El niño de la Caseta, quien acudió a Pamplona por vez primera en el año 1959, siendo testigo de treinta sanfermines. Presume "Er Niño de la Caseta" de haber sido buen amigo de Orson Wells y de haber conocido a Emest Hemingway en el hotel La Perla con el que en varias ocasiones compartió botella. "Er Niño de la Caseta" procura viajar a todas las ferias españolas, y es de lo que su afición taurina le lleva a cruzar el charco. Rolf (Rodolfo) perteneció en 1961 a la escuela taurina de Alicante, habiendo toreado dos años como becerrista. En la actualidad, además de ser un miembro activo de la Peña Taurina Los Suecos, es socio de la Peña Taurina La Giralda, de Bogotá.
"Es Pamplona -dice "Er Niño de la Caseta"- la única ciudad a la que acudimos uniformados. Usamos nuestra propia blusa sanferminera de cuadros pequeños blancos y rojos, con cuello y puños rojo, y el clásico pañuelo pamplónica con nuestro anagrama".
La Peña Taurina Los Suecos celebra en Suecia tres reuniones anuales. La primera reunión se hace en la ciudad de Malmoe en el mes de marzo, poco antes de la feria de Castellón. Es el momento de preparar la temporada taurina de España. La segunda reunión tiene lugar en el mes de octubre en la ciudad de Gotemburgo, después de haber finalizado todas las ferias del toro. Es la hora del balance.
Y la última reunión se celebra en Stocholm (Estocolmo) durante las Navidades.
Estas reuniones, como todas las actividades que desarrolla en Suecia esta peña, se realizan siempre con total discreción v sin propaganda alguna. "Los socios de la peña tenemos un acuerdo en Suecia que es el de no hablar de toros en público, pues la gente se nos echa encima. Está muv mal visto ser taurino. Si en algún sitio detectan nuestra afición a la fiesta española, nos organizan verdaderas broncas. En cierta manera vivimos en la clandestinidad". explica "Er Niño de la Caseta".
L O. S, además de fundador de la peña, es en la actualidad su presidente; "es un gran aficionado a los toros -dice uno de los socios-, hasta el punto de que Curro Romero es el padrino de sus hijas, pero, curiosamente, no conoce Pamplona".
La Peña Taurina Los Suecos cuenta actualmente con algo más de setenta socios, además de varios socios honorarios entre los que se encuentra el rey Juan Carlos I, el escritor y premio nobel Camilo José Cela o el ex-matador de toros Antonio Ordóñez. La peña concede anualmente un trofeo, desde 1978, a un personaje taurino que no necesariamente tiene que ser torero, si bien, entre los galardonados predominan los mejores novilleros de la temporada. El personaje receptor del trofeo taurino es designado en la reunión del mes de marzo.
Una de las actividades que mantiene viva y coordinada a la peña durante todo el año es la confección de la revista El Cartelito, de la que se editan cuatro números anuales, y en la que Pamplona y sus fiestas son protagonistas habituales.
Recientemente el novelista norteamericano James Michener ha dedicado un espacio a la Peña Taurina Los Suecos en su novela The Drifters.
Durante su estancia en los Sanfermines esta peña sueca reparte su alojamiento entre el hotel La Perla y el hostal Bearán, siendo este último establecimiento en donde tienen su cuartel general.

...y en la página siguiente, se encuentra esto:

"Pero sin duda. de todos los ciudadanos suecos que visitan asiduamente nuestra ciudad durante los Sanfermines; el más conocido y pintoresco de todos ellos es Staffan Safwenberg. Este caballero fue noticia durante el año 1992 en los medios de comunicación navarros -también en algún medio estatal- y en la prensa sueca, por su intención de organizar un encierro sanferminero en las calles del casco antiguo de Estocolmo. La tramitación en la capital sueca de todos los permisos puso en jaque a las autoridades del pais nórdico, quienes no llegan a encontrar la forma legal de denegar tan pintoresca solicitud. El singular encierro y la posterior celebración de una corrida de toros estaban perfectamente diseñados y preparados; Staffan Safwenberg no había dejado ningún cabo suelto: el vallado sería colocado bajo la dirección de técnicos navarros, los alguaciles de la corrida iban a sordos mujeres de la Policía Montada de Estocolmo, las reses procedían de la afamada ganadería española de don Eduardo Miura y contaban va con la autorización para entrar en Suecia concedida inocentemente por el Ministerio de Agricultura de aquel pais; y para que nada faltase se pretendía que hubiese un sacerdote católico para que suministrase la atención espiritual necesaria en caso de cogida grave o mortal. La solicitud de celebrar estos actos taurinos dentro del marco festivo de la Fiesta del Agua (agosto) se mantiene, y de momento las autoridades suecas, hábilmente regateadas por este miembro de la Peña Sueca, lo único que tienen claro es que no pueden autorizarlo pues están convencidos del coste electoral que puede acarrear la autorización de algo tan impopular. La Jefatura de Policía sueca ha tratado de buscar en la ley el arma legislativa para denegar el permiso, si bien, por no existir allí las corridas de toros no hay ninguna ley que las prohiba. La policía sueca se vio igualmente sorprendida al comprobar que todas las diligencias y permisos previos habían sido cumplimentados ya con resultados satisfactorios por el promotor de la idea."